Una fina lluvia lleva dos días cayendo en el
occidente de Cuba. En la primera jornada, como es lógico, los muchachos no fueron a la
escuela, las personas se recogieron, los centros de trabajo laboraron a media
jornada, las calles estaban vacías.
Pero ya hoy es otro día, las
calles se llenaron de sombrillas, paraguas y capas de agua, las parejas
siguieron caminando muy abrazadas, los niños volvieron a la calle, y hasta la
eterna cola de la Heladeria Coppelia,
retornó… larga, lenta y agotadora como siempre, mientras la persistente lluvia
continua cayendo en La Habana
Bien ilustrativa la serie, pero tienes otros trabajos muchos mejores...la presencia de las sombrillas etc bien marcada...se nota la ausencia de la llovizna en sí. No obstante, me gusta mirar por tu lente.
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